En la plaza Bolívar de San Félix, estado Bolívar, habita esta especie, heredera de los fotógrafos de pueblo: aquéllos señores que viajaban con sus enormes aparatos de pueblo en pueblo retratando y vendiendo esos retratos a la gente que, aunque poco a poco fue acostumbrándose a ver su reflejo en un papel sin vida, siguió comprando y dando sustento a estos fotógrafos primigenios que luego, ya lo vemos, se extinguieron.
Ahora, ya lo vemos, quedan estos. Fotógrafos de plaza, que venden fotos carnet, o pasaporte o postal. Son varios, y trabajan con mucha hermandad. El cliente que vaya llegando se lo van asignando al fotógrafo que le corresponda el turno. Así, intuyo, todos trabajan, todos comen. La sobrevivencia de la manada. Ellos saben que son una especie en peligro de extinción.
Fotografía Líquida 
Me hubiese gustado entrevistas a los fotografos, el preguntarles el precio de sus fotografías, con que las imprimen y si aún hoy por hoy le ven algo de magia a lo que hacen.
Y lo hice, no a modo de entrevista, sino de curiosidad. Pero el precio no vendría al caso… Las imprimen en una impresora portátil que tienen allí mismo, y lo de la magia… creo que la respuesta me gustaría, y te gustaría menos que la duda… Abrazo, hache!